Vigila los síntomas de un golpe de calor
Un golpe de calor es una elevación brusca y repentina de la temperatura del cuerpo, por las altas temperaturas o por un exceso de ejercicio físico. Es una situación de urgencia que puede ocasionar la muerte si no se actúa con rapidez.
Si sientes un golpe de calor, refréscate con una esponja o toalla húmedas y bebe líquidos sin alcohol, preferiblemente agua, té frío o zumos de frutas.
Si no sientes mareos, intenta darte un baño.
Si presentas cefaleas, mareos, calambres, malestar general, sensación de sofoco o agotamiento debido al calor, llama al teléfono de emergencias 1-1-2.
No dejes nunca a un menor solo en el automóvil, ni siquiera un minuto, ni en días nublados en los que parece que no haga mucho calor. Piensa que 30 minutos de exposición al sol con una temperatura exterior de 30ºC suponen una temperatura interior de 50ºC a la altura de la cabeza del niño/a y pueden causar su muerte.
Si ves a un/a menor solo en un coche, llama inmediatamente al teléfono de emergencias 112.